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«Robo sistemático»: nueva demanda contra Shein por violación de la propiedad intelectual
17/07/2023 0 Comments
|Los diseñadores Krista Perry, Larissa Martinez y Jay Baron cargan de forma legal contra las copias de Shein.
Más de 6.000 artículos nuevos diariamente llegan al catálogo de Shein, según datos de Xataka. Si multiplicamos los datos diarios por 30, al mes llegan 180.000 nuevas referencias al catálogo del gigante asiático. Ante estos números, poco más tenemos que añadir: sin lugar a dudas, estamos ante el monstruo del fast fashion con mayor influencia a nivel internacional. La sostenibilidad no parece ser una preocupación del grupo, al mismo tiempo que tampoco parece serlo la propiedad intelectual. En numerosas ocasiones se han hecho públicas demandas contra Shein a causa de copias en diseños, un fenómeno que regresa de nuevo.
Shein suma una nueva denuncia a la larga lista de la mano de los diseñadores Krista Perry, Larissa Martinez y Jay Baron, que «afirman que Shein ha infringido sus derechos de autor y marcas registradas al copiar y vender réplicas exactas de sus creaciones», como leemos en Fashion United. En el medio citado, anuncian que «los diseñadores argumentan que esta práctica, posible gracias a la inteligencia artificial y a una larga y opaca cadena de producción, no solo permite a esta empresa apropiarse indebidamente de creaciones de todas las categorías con alto potencial comercial, sino que la ampara y forma parte integral del proceso de diseño y de la identidad misma de Shein, según consta en el documento judicial citado por TFL».
En teoría, Shein posee un algoritmo secreto con el que «determina las tendencias emergentes en moda al tiempo que las manda fabricar», un sistema que «no podría funcionar sin generar copias que podrían perjudicar enormemente la carrera de un diseñador independiente». «No hay ninguna Coco Chanel o Yves Saint Laurent detrás del imperio Shein», afirman los demandantes. A esto, sumamos que alegan que es «la mejor empresa de ropa del mundo gracias a la tecnología de alta gama y no al diseño de alta gama».
Las prácticas de Shein están limitadas por la opacidad y por la gran red que han construido, que resulta muy difícil de rastrear. Anteriormente, el gigante actuó de la siguiente forma ante las acusaciones de copia, «retirando los productos de su web, alegando que no busca infringir los derechos de autor y que la responsabilidad recae en sus proveedores, a quienes exige el cumplimiento de las políticas de la empresa y la certificación de que sus productos no violan la propiedad intelectual de terceros». Ahora, veremos cómo actúan ante esta nueva ofensiva.